¡Cárcel
y perpetua a todos los asesinos y cómplices de la dictadura!
¡Cárcel para Blaquier!
¡Cárcel para Blaquier!
¡Basta
de persecución y espionaje a los trabajadores!
Carlos
Pedro Blaquier, dueño de Ledesma, quien, predeciblemente, viajó afuera del país
por “razones de salud”, viene evitando declarar ante el tribunal por las denuncias
sobre su participación en la “Noche del Apagón”, en la cuál fueron secuestrados
400 obreros del ingenio y 30 fueron asesinados, hechos
registrados en enorme cantidad de investigaciones. En esos años Ledesma
manejaba la usina que proveía energía eléctrica a la ciudad. El propio represor
Fraga en su declaración en el juzgado hizo mención a la colaboración de la
empresa Ledesma con la dictadura: "Una
vez tuve un incidente con una camioneta de Ledesma que trasladaba
gendarmes". Indigna leer el comunicado de Blaquier victimizándose
diciendo: “Lamentablemente, estos hechos
gravísimos me impidieron cumplir con mi deseo de declarar en la causa, como
estaba previsto. Los agresores me obligaron a retirarme del lugar y pude, así,
preservar mi vida. Ante estos graves hechos, el juez de la causa decidió
suspender mi indagatoria. Se realizó la debida denuncia de intento de
homicidio, la cual deberá ser investigada por la justicia para identificar a
los culpables de estas acciones”. Este hecho suena raro cuando las
organizaciones habían decidido despejar el lugar para que Blaquier no utilizara
eso como argumento para no declarar.
Relacionado
con este hecho, en el allanamiento a oficinas de la empresa fueron secuestrados
informes de inteligencia del año del 2005 con listas negras, de dirigentes,
activistas obreros y populares con actividad política, entre las que se
encuentran militantes de nuestro partido PRS. Dejando aun más en evidencia que
la patronal Ledesma cuenta con un gran aparato de espionaje desde hace años.
Ledesma
es una de las principales empresas del
país, con enormes negocios en las áreas de combustibles, azúcar, papel, etc. Jujuy,
donde están emplazadas sus principales industrias es prácticamente “propiedad
privada” de este empresario que posee estrechos vínculos con el gobierno
kirchnerista que le otorga subsidios para sus negocios en Biocombustibles. Es
un ejemplo más de la política de favoritismo y conciliación del gobierno con la
burguesía. Le garantiza a Blaquier que siga acumulando riquezas, si el propio
Blaquier se autodenomino “Cristinista” haciendo referencia a su buena relación
con el Gobierno Nacional.
Para
los 60.000 habitantes de Loor. Gral San Martin (Ledesma) hubo una parte de la población que si tenia en
claro el accionar represivo de Blaquier pero para
la mayoría causo sorpresa
las noticia sobre el accionar represivo, los seguimientos y el trabajo de
inteligencia realizado el aparato policial, claramente diseñado al antojo de
Blaquier y que cuenta con la complicidad de los políticos y los partidos patronales tanto a nivel nacional como
provincial vale recordar que el propio gobernador Kirchnerista Fellner con su
estudio jurídico trabajo para blaquier. En Jujuy todas las instituciones en
general funcionaron y funcionan abiertamente al servicio de
la negrera patronal de Ledesma, ya desde comienzos del siglo pasado,
a partir de la apropiación de las tierras a través del asesinato de los pueblos
aborígenes de la región. Otro ejemplo es con la impunidad que actuaron la
seguridad privada de Ledesma junto a la policía para desalojar a las familias
que ocuparon varias hectáreas el año pasado que termino con la muerte de 4
personas y varios heridos o sea que con tal de defender la propiedad privada se
asesina y reprime a las familias que no tienen un techo donde vivir, la
patronal y el estado unidos contra el pueblo pobre.
Kirchnerismo: Dos discursos para la misma política
Si
los anteriores gobiernos burgueses basaron su política hacia el régimen militar
en la impunidad mediante las Leyes de Obediencia Debida y Punto Final
(Alfonsín) y los indultos de Menem, el kirchnerismo se presenta como un
gobierno que defiende los derechos humanos. Se han enjuiciado a varios de los ya
viejos represores quizás los mas conocidos por la sociedad, pero aun siguen
libres miles de civiles y militares responsables de las desapariciones de mas
30.000 compañeros algunos de esos responsables todavía cumplen funciones en
algún cargo. La prueba más contundente contra el kirchnerismo que sólo hay
encarcelados unos 200 asesinos. Teniendo en cuenta que según informes de los
organismos de derechos humanos hubo más de mil centros de detención
clandestinos las conclusiones están a la vista. En realidad desarrolla una
política reaccionaria enteramente al servicio de la burguesía, cuyo principal
eje es conseguir la recomposición plena del actual aparato represivo del
Estado. Para esto las masas deben creer que el carácter de las FFAA ha cambiado
y que estas son respetuosas de la “voluntad popular”. Sin embargo, en este
juicio hay un elemento de crisis en el desarrollo de esta política que es el
juicio a un poderoso grupo del empresariado nacional. Seria el primer ejemplo
de enjuiciamiento a los cómplices empresariales de la dictadura que siguen
siendo protegidos por el gobierno nac y pop de Cristina con su política de
ataque sistemático y persecución a los delegados y comisiones internas con
espionaje como con el Proyecto X, con causas judiciales con la “Ley
antiterrorista” o con patotas armadas por la burocracia de los gremios apañada
por el gobierno.
El
kirchnerismo y todo el régimen político, los partidos de la oposición patronal,
la justicia, etc, harán lo imposible para que Blaquier zafe de este juicio. En
esto hay, antes que nada una razón “de clase”. Por eso más que nunca tenemos
que unir los trabajadores de las diferente empresas de Ledesma como los del
Citrus y Azucareros que sufren la precarización laboral, los bajos salarios,
los despiden, les arman causas y procesan cuando se quieren organizar etc,
junto a las organizaciones sociales, los partidos políticos, gremios y la
juventud. En conclusión, sólo una
poderosa movilización obrera y popular podrá imponer la cárcel a Blaquier y
todos los cómplices de la dictadura, fortaleciéndonos para enfrentar las
persecuciones y represión del régimen actual que, disfrazado de “democrático”,
actúa enteramente al servicio de las patronales.
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